Por fin pudimos acercarnos a Viniegra de Abajo, hace poco tiempo declarado como unos de los Pueblos más Bonitos de España, dar un paseín con Jesús García y parar a comer en casa de Irene Sobrón (queridos primos riojanos).
Irene tiene una mano fantástica para la cocina. Hace guisos y platos tradicionales con maestría empleando ingredientes de calidad y mucho cariño.
Nos acogieron en su fantástica Casa de Comidas Irene y nos ofrecieron lo mejor de su cocina, hecha con ternura y pasión.
El restaurante es pequeño, pero muy acogedor. Esperamos en la terraza con un botellín y unas croquetas caseras de jamón:
Luego, pedimos ya sentados diferentes platos para así poder probar de casi todo. El vino con el que acompañamos era, por supuesto, un Rioja:
Los guisos son su especialidad. Por eso, no podían faltar las alubias rojas de Anguiano a la riojana y las pochas con boletus (embotados recién recogidos en la zona). Espectaculares los dos guisos de legumbres:
De segundo probamos las manitas, las sorprendentes albóndigas con salsa de naranja:
Y un guiso de ciervo en salsa para chuparse los dedos. También probamos las delicadas alcachofas:
Y un plato que no había probado nunca: la "sangrecilla" de cordero encebollada. Una exquisitez con sabor a morcilla pero muchísimo más suave y delicada al ser de cordero.
Los postres fueron las torrijas, natillas y queso con dulce de membrillo artesano hecho por Irene.
No puedo más que expresar mi agradecimiento a Irene y Jesús, por su generosidad, simpatía y cercanía. ¡Gracias primos riojanos!
Absolutamente recomendable si estás por la comarca o por la sierra de la Demanda.
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