Viendo esta imagen parece que estemos en la Gran Manzana en lugar de enfrente de El Retiro en Madrid. Y es que todo en este café situado en la C/Alcalá 107, 28002 Madrid (Metro Retiro) nos recuerda a un local en TriBeCa: su decoración vintage con ladrillo visto, vidas, mostrador de mármol, mesa comunal, veladores de metal, sillas de cuero, espejos a tutiplén y muchas plantas.
Su comida es muy molona: healthy, orgánica, con pan de masa madre, sin azúcares en sus dulces, con un café delicioso de TomaCafé en su súper cafetera La Marzocco.
Y luego la amabilidad y trato cercano (sin caer en el empalago) de su camarera (creo que Sara era su nombre) y sus compañeros.
Nos acercamos a pasear un sábado en nuestra caminata matutina al Retiro y nos topamos con este precioso lugar, así que, tras reservar para media hora después, nos encontramos desayunando como reyes/reinas.
Pedimos cafés, en mi caso un Golden Latte con tostada de masa madre y mermelada casera de higos o albaricoque. También compartimos un trozo de bizcocho de Té Matcha:
Nos gustó tanto, que decidimos ir a comer otro día todo la familia (y una más) en forma de desayuno tardío. La tosta de peras confitadas con brie en pan de masa madre tenía esta pintaza.
Pedimos para compartir una ensalada de burrata con tomate en dados:
Probamos el Bagel con salmón ahumado, con unos bollitos de brioche con semillas de amapola para morirse:
Y no podíamos irnos sin comer sus fabulosos huevos revueltos con parmesano y aceite de trufa: nos fliparon!
Todo ello acompañado de cerveza La Virgen o de Fritz Cola, una cola alemana ecológica más parecida a la Pepsi:
Desde luego, si os gustan los desayunos ya estáis tardando en ir a probarlos en un ambiente relajado y muy cool.
Abre de 8.30 a 20:00 a diario, excepto los fines de semana que abre a las 9:00. Los domingos cierra a las 18:30 y los lunes cierra.
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