Soy una entusiasta del vermut. Me encanta este vino fortificado con su sabor botánico a hierbas, flores, cítricos y raíces.
La palabra deriva del alemán wermut que significa "ajenjo" que es el nombre de la hierba artemisa o principal componente de esta bebida maravillosa.
Se tiene constancia de su existencia desde Hipócrates, el filósofo y médico griego. Por eso en la Edad Madia se llamaba "vino hipocrático".
Se consume mucho en Italia, donde se empezó a fabricar masivamente en Turín a finales del siglo XVIII. Fue Carpano quien comercializó un vino realizado con maceración de 30 botánicos.
La llegada del vermut a España fue vía Cataluña, en concreto en Reus. Perucchi fue el primer vermut producido en nuestro país.
El más famoso es el Rosso o rojo en español, que es más dulce o herbal por las notas de ajenjo.
En Reus se encuentra este edificio industrial de 1908 que consigue en dos plantas y un patio cubierto, o descubierto según se antoje el día, capturar la historia del famoso aperitivo y rendir homenaje a la ciudad del mejor vermut del país.
Se ubica en la Carrer de Vallroquetes, 7, 43201 Reus, Tarragona.
Joan Tàpias ha reunido miles de objetos relacionados con esta bebida maravillosa: botellas, carteles, cuadros, placas...
Tienes rincones chulísimos en los comedores, pasillos, escaleras...
Los comedores con encanto:
Nada más entrar tienes el bar para tomar el aperitivo -no en vano en España se dice "ir a tomar un vermú"- acompañado de algo para picar.
El restaurante cuenta con en Solete Repsol y tiene una carta mediterránea.
Nosotras nos sentamos en el patio y empezamos tomando un vermut con unas olivas mientras leíamos la carta/mantel individual.
Enseguida vinieron las croquetas caseras de setas y trufa y pollo asado:
La coca de sobrasada de cerdo negro de Mallorca con queso de vaca y miel de romero, deliciosa:
La ensalada de queso de cabra con membrillo, fresas, frutos secos y vinagreta de vinagre de Módena:
La tempura de bacalao con reducción de vermut Cori estaba de vicio:
Y finalizamos con los postres. Se nos antojó compartir la Tarta de queso casera con frutos rojos:
Y el insólito Pan de Cristal con chocolate negro, AOVE de Siurana y sal Maldon:
También compramos vermut para llevar a casa, del que producen para ellos Cori, una marca de Miró.
Hasta sus baños homenajean al vermut.
Con citas alusivas a la mítica bebida:
Una comida fabulosa en un sitio precioso y único.
Absolutamente recomendable.
PD: Con cariño y en recuerdo de unos días maravillosos en Tarragona con Mariajosé y Celsa Poza.
Comentarios
Publicar un comentario