Si ya conoces los otros restaurantes madrileños del grupo BigMamma, el mítico y primogénito Belmondo y su preciosa hermana pequeña Villa Capri, ya sabes de qué va esta propuesta gastronómica.
Francamente, este hijo pequeño recién nacido y ubicado en los bajos de la magnífica Torre Picasso, Paseo de la Castellana 89, Plaza Pablo Ruiz Picasso, 1, Tetuán 28020 Madrid, es un italiano en toda regla que recrea todos los elementos de la Dolce Vita.
Nos acercamos un día de diario de principios de marzo, es decir recién abierto días antes, a la hora de apertura (estaban ya todas las mesas reservadas para más tarde) y es que se ha convertido en el restaurante al que todo el mundo quiere ir.
El interior es impresionante. El éxito de estos locales del grupo BigMamma repartidos en un puñado de países, es dotar a una cocina italiana de calidad con ingredientes de proveedores genuinos con una atmósfera envolvente, joven, energética y vibrante.
Nos encanta a todas: madres, abuelos, hijos e hijas, sobrinas y cuñados, modernos o conservadores. Nos dejamos arrastrar por el ambiente y disfrutamos de unas horas de escándalo.
El espacio es enorme y está dividido en dos ambientes. Los tonos rojos dominan el lugar. Al entrar, una estética retro repleta de líneas curvas con la barra de bar que prepara los cócteles te da la bienvenida.
Subes a la segunda planta (gracias querida Claudia por llevarnos al cielo del Circolo) y empieza la fiesta. Más de 2000 botellas engalanan paredes y techo y el estampado de leopardino de los sofás, sillas y banquetas y la moqueta colorida te anuncian la diversión.
Nada más sentarnos nos trajeron un vino espumoso de regalo (gracias de nuevo, Claudia). La vajilla italiana pintada a mano y el resto del menaje muy cuidado, como siempre.
En este ambiente y siendo de noche, empezamos por unos cócteles. El Fully Monada (4€) no tenía alcohol, como indica el nombre es una limonada muy molona.
Los Passion Spritz en jarra (22 €) fueron la otra opción para los chicos:
Comenzamos con los Arancini Pulled Pork (9,5 €), las croquetas de arroz italianas que son una delicia auténtica:
Luego nos lanzamos a compartir las pastas y la pizza. Los Rigatoni a la Norma (15 €):
Y la Girella al Rabo de toro (16€) estaban espectaculares. ¡Cómo preparan la pasta en estos restaurantes!
La Pizza Mammargherita (13 €) es siempre nuestra petición en materia pizzera para comprobar la textura y fermentación de la masa, el tomate utilizado y la mozzarella. Sobresaliente.
La Pizza Truffle Makers (20 €) fue la otra elección:
De aquí no puedes irte sin probar los postres. Me parece que su tiramisú, el Tigramisú es el mejor de Madrid. No le falta ni le sobra NADA.
Como tenían el Tiramisú al Pistacchio (10 €) no pudimos dejar de pedirlo. Nos gustó más el clásico.
Conclusión: unos 28€ por persona para una comida de escándalo. Es un imperdible en Madrid.
PD. Ya sabéis de mi debilidad por ver la decoración y estado de los baños.
Dan una idea de la preocupación del empresario por el confort de la clientela.
Aquí también son espectaculares. Tienen unos espejos para que hagas la foto invertida del neón.
Ya sabes dónde ir para divertirte...
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