Ya es tradición en mi casa ir a celebrar mi cumpleaños (caiga en el día que caiga) en un italiano con una deliciosa cena en familia.
Esta vez le tocó el turno al restaurante de Luigi Bertaccini en la C/Zurbano, 85, 28003 Madrid. Amigo y discípulo de Andrea Tumbarello, Luigi practica una cocina una cocina honesta, sin estridencias, en la que las especialidades italianas hablan por sí solas.
Su intención es que te sientas "entre amigos", como en casa. Así nos sentimos en todo momento. Nos trataron de maravilla (sin excesos, siempre innecesarios) y me pusieron la consabida velita de cumpleaños para celebrar el aniversario.
El local es pequeño e informal, quizás un poco frío, pero la calidez viene con su cocina.
Yo quería probar el famoso Huevo millésime de yema sumergida en crema de boletus y trufa de Andrea Tumbarello, y el propio Luigi se encargó de añadir la trufa laminada de una forma muy generosa. Aquí está después de romper la yema y remover todo:
Los chicos pidieron pasta. Los ravioli burro e salvia, rellenos de requesón y espinacas:
Y los tallarines con trufa, que dejaban un aroma espectacular en la mesa:
También quisimos probar las pizzas. Las elegidas fueron la Contadina, con mozzarella, jamón de Parma, rúcola y queso blando Romagnolo:
Y la Arrabiatta, picantita con salami y tomates cherry:
Las dos riquísimas, con una masa fina, crujiente por debajo pero esponjosa por dentro. Con buen relleno y nada sosa (creo que en muchos sitios te dan la pizza muy insípida).
Para terminar tan buena cena pedimos la Morcilla de chocolate (receta de la tía Dina) con sorbete de frambuesa, que a mi gusto, estaba un poco seca:
Y la Pannacota con canela, que les encanta a los chicos:
Acompañamos la cena con cerveza italiana. Al hacer la reserva con El tenedor pudimos beneficiarnos de un descuento del 40% que hizo la cena muy asequible.
Desde luego, a mi me encanta la trufa y es el lugar en el que han sido más generosos en la adición del preciado hongo.
Muy recomendable: ***
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